La palabra cantada me emociona. Es el lugar donde no siento miedo. Donde soy yo. No me di cuenta de manera clara y profunda hasta que me subí a un escenario a cantar sola. ¡Qué momento esclarecedor! La timidez desapareció y me sentí plena y vibrante.
Desde muy pequeña me marcó la música de manera muy profunda. Era extremadamente vergonzosa. Hablaba muy poco. De hecho, en el informe final de curso de Jardín de Infancia decía textualmente: “sabemos que Gabriela sabe hablar porque la escuchamos cantar…” Conectaba con mis vínculos a través del silencio, los gestos y la mirada pero sobre todo a través de la música.
MIRARNOS DESPACIO
El pasado mes de diciembre publiqué un nuevo tema musical. “Mirarnos despacio” es un canto tierno y amoroso a mi hijo. Soy una profunda defensora de los abrazos y de expresar el amor a los afectos… En este caso se ha convertido en canción. Mi hijo Tomás ya se sabe la letra y la canta conmigo. No sé bien si entiende mucho, pero ojalá que acuda a este tema musical cuando yo no sepa sostenerlo con la palabra o la escucha.
Para este tema he contado con Gonzalo Durán desde Montevideo para la producción musical. Gracias, Colo! Gracias por aportar tu sensibilidad y tu ternura. Siempre es muy emocionante trabajar contigo! Gracias Anibal Pereda por ese bajo hermoso! Y gracias Rafa Sanchez, de Hive Recording Studio, por grabar mi voz. Espero que lo disfrutéis!
TODO SE ENCIENDE
CORO RAPSODIA
Mi PRIMERA BANDA
